CAMBIO CON COLAEl cambio del Director Rubén Villacaqui puede generar todo un dolor de cabeza para la gestión de Edgar Caballero Cano en la Dirección Regional de Salud debido a una serie de hechos que hoy podrían destaparse.
Según nuestras propias averiguaciones, el cambio de Villacaqui de la dirección del hospital obedecería a una fuerte presión del mencionado director por parte de algunos funcionarios del gobierno regional al no haber favorecido a un galeno en el concurso de provisión efectuado por el nosocomio huarasino.
Esto no es todo, las relaciones tirantes entre Caballero y Villacaquie han ido en franco deterioro hasta el punto que el Director del Hospital se declaró sorprendido por su cambio cuando en los pasillos de la DIRES su cambio era algo cantado desde hace varias semanas incluyendo el nombre de su sucesor.

PLAN DIRECTOR
Al margen de los argumentos del Director saliente, se sabe que todo cargo de confianza es pasajero y no hay necesidad de entornillarse en el poder. Sin embargo, llama poderosamente la atención que sopretexto de este cambio se ponga en riesgo y peligro la ejecución de la unidad Materno Perinatal una obra, fruto de la lucha del 7 de Marzo y del cuestionado proceso de diálogo entre las autoridades y la Barrick Misquichilca.
Es necesario que las autoridades regionales, lejos de solicitar una licencia para salvarse de las críticas enfrenten este nuevo vendaval de acusaciones a fin de no generar un clima de inestabilidad que es ahora atizado por los propios miembros del Cuerpo Médico que exigen su derecho a elevar una terna de sus recomendados para el cargo a cambio de favores de grupo.
PROTESTA LIGHT

Lo que les falta a las enfermeras en sensibilidad y buen servicio les sobra en protesta, sin embargo, por más que se esforzaban para gritar a los cuatro vientos su derechos y beneficios laborales parece que sus dirigentes no estaban del todo convencidos sobre la pertinencia de la medida adoptada.
Las enfermeras pedían homogenización cuando lo correcto es exigir nivelación de sus sueldos diferenciados por propia desidia así como la de los responsables de la administración de los hospitales en donde han establecido un régimen singular de pagos sin ningún sustento técnico ni económico. Lo cierto es que el Estado debe regularizar ese injusto sistema de contratos para dotarles de las garantías laborales aunque esto muchas veces signifique ir en desmedro de los pacientes y usuarios que reclaman una atención eficiente y eficaz.
CONCURSO

Volviendo al tema de salud, nos parece que la propuesta hecha por el sindicato es la más correcta y coherente si se quiere evitar el clima de inestabilidad y desgobierno en los hospitales cada vez que hay una nueva designación.
Oriol Laguna señala que se debe convocar a un concurso abierto para cubrir las plazas de directores en los 12 hospitales con los cuales cuenta la Dirección Regional de Salud y en eso concordamos, pero mientras se implemente esta medida es necesario que los que se encuentran a cargo de estas instituciones entiendan que se trata de cargos de confianza, es decir de facultades transitorias por los cuales deben no aferrarse al cargo para saber cuando ceder el puesto a quien fue designado. Será la población, el periodismo y los estamentos fiscalizadores los que hagan lo demás en salvaguarda de los intereses institucionales.
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