«EL AVISPÓN»

INCERTIDUMBRE CULTURAL
La renuncia del Director del Instituto Nacional de Cultura de Ancash ha generado cierto desequilibrio en la conducción del INC a cargo de Benjamín Morales Arnao.
Si ben la renuncia no ha sido aceptada oficialmente por la arqueóloga Cecilia Bákula y se espera una posible ratificación, la terna del probable remplazo la integran en estos momentos básicamente los partidarios del APRA y algunos artistas de reconocida trayectoria profesional.
Se barajan los nombres de Domingo Guzmán Huamán, conocido militante y padre del ex candidato a la alcaldía municipal seguido del pintor aijino Leoncio Maguiña, como los más probables.
Sin embargo en la capital existen presiones de diferente índole desde los que tocan las puertas del legislativo así como los que se encuentran cercanos al ejecutivo y al mismo jefe de Estado, Alan García Pérez.

GESTIÓN CULTURAL
A lo largo de los últimos años ha sido sólo una élite los que han mantenido cierta injerencia y predominancia la designación de los directores y sobre todo en cuanto a la gestión cultural.
Esa oligarquía cultural o mejor dicho de gente vinculada con conocidos apellidos y de alcurnia ha impuesto su política oficial del quehacer cultural dejando de lado las variadas manifestaciones así como concepciones vanguardistas de lo cultural.
Desde las casas de la cultura así como del mapa cultural de Ancash se ha pasado hacia una gestión referida básicamente al cuidado y la preservación del patrocinio netamente físico.

MANIFESTACIONES CULTURALES
Sin duda la labor desempeñada por el glaciólogo es reconocida por propios y extraños, entre ellos la puesta en valor de Ichik Wilcahuaín, los trabajos de excavación en Chavín y en Pumacayán con reveladores y sorprendentes resultados lo mismo que la inauguración del parque lítico y otras infraestructuras conexas como el cafetín.
Sin embargo en cuanto a la promoción cultural aún estamos lejos de alcanzar los stándares como sí lo tienen otras ciudades. Esto debido al escaso apoyo de las autoridades regionales y locales así como al mínimo o escaso presupuesto del que se dispone para estas acciones.

CULTURA POPULAR
Frente a la forma oficial de visionar la cultura s eha impuesto otra que paralelamente reclama su espacio y ella tiene que ver con la producción artística, literaria así como musical que se genera en espacios muchas veces poco propicios como para ser reconocidos.
Frente a esta forma de quehacer cultural las nuevas generaciones siguen reclamando con justa razón contar el el apoyo y el impulso de las instituciones responsables de su difusión y promoción. Asistimos en muchos de los casos a la dicotomía entre la cultural oficial de élite y la cultura popular que tienen sus propias formas de manifestación dentro de la sociedad huaracina aunque a veces de manera restringida.

RETOS Y MITOS
La nueva gestión cultural sea cual fuere el responsable de conducir los destinos del INC tiene que hacer frente a la deshumanizante globalización y la pérdida de identidad de nuestra población así como rescatar las diversas manifestaciones culturales mediante una serie de mecanismos como el Consejo de la Cultura a través de personas e instituciones involucradas en rescatar nuestras costumbres, preservarlas y sobre todo garantizando su procedencia y modo de propagación sin caer en la desnaturalización y pérdida.
Es necesario poseer un actualizado inventario de estas manifestaciones culturales sobre todo de aquellas que corren el peligro de su extinción frente al avasallador avance de costumbres y prácticas extranjerizantes y alienantes con incidencia sobre todo en nuestra niñez y juventud.